La sede de la Fundación Cajasol en Sevilla se convirtió este 15 de marzo en el epicentro europeo de la economía circular con motivo de la ‘Jornada Europea Economía circular: El compromiso de las ciudades’, evento organizado por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el Ayuntamiento hispalense y Ecoembes, organización medioambiental sin ánimo de lucro que promueve la sostenibilidad a través del reciclaje de envases en España, como punto de encuentro de destacadas administraciones públicas de Europa. Un espacio en el que se intercambiaron ideas que permitan implantar un modelo de ciudad más sostenible y respetuoso con el medio ambiente, en el marco del nuevo paradigma social, medioambiental y económico que representa la economía circular.
Juan Espadas, Alcalde de Sevilla y Presidente de la Red Española de Ciudades por el Clima, Fernando Rodríguez Villalobos, Presidente de la Diputación de Sevilla y Presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, José Fiscal López, Consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, María García Rodríguez, Secretaria de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, y Óscar Martín Riva, Consejero Delegado de ECOEMBES, fueron los encargados de inaugurar la jornada sobre la economía circular en la Fundación Cajasol.
En esta Jornada, además, se celebró la firma de la Declaración de Sevilla, un compromiso que alcaldes europeos asumen con el fin de alcanzar los objetivos establecidos por la Comisión Europea y que fijan los pasos a seguir hasta 2030.
Al respecto, Europa estima que, si se aplica el paquete de medidas en materia de economía circular que aprobó en diciembre de 2015, se crearían más de 400.000 empleos en países de la Unión Europea, de los cuales 52.000 se localizarían en España. Todo ello con el concepto central de economía circular, que plantea convertir aquello que se desecha en nuevos recursos, impulsando un nuevo sistema de producción y crecimiento económico basado en los principios de la naturaleza que reutilice o recicle los materiales y residuos que se generan para crear nuevas materias primas.
ANDALUCÍA, ENTRE LAS MÁS AVENTAJADAS
Durante la inauguración, María García señaló que el debate abierto es «de lo más oportuno» y que «no tiene sentido» seguir apostando por el actual modelo. «Debemos proteger nuestro entorno natural, hay que pasar al modelo circular; el debate es cómo hacerlo de la mejor manera», indicó para manifestar que desde el ámbito institucional se están dando pasos «muy importantes» para el final del ciclo, si bien «podemos ir más lejos. El reto es superar este modelo de gestión».
Por su parte, Fiscal sostuvo que para lograr el cambio de modelo hay que adoptar nuevos instrumentos tanto legales como económicos y sociales, siendo necesario potenciar, especialmente, la concienciación social y la participación de forma coordinada de los sectores implicados en todas las etapas de producción y de la generación y gestión de los residuos. En materia de economía circular, añadió, Andalucía es «una de las regiones españolas más aventajadas», con el trabajo actual en un Plan Integral de Residuos de Andalucía.
De su lado, Villalobos afirmó que, dentro de la apuesta del municipalismo por la sostenibilidad, se trata de «una potentísima ventana de oportunidad». «Si somos capaces de asumir ese concepto, ayudaremos a reducir el uso de los recursos y la generación de residuos», dijo el también presidente de la Diputación de Sevilla, asegurando que desde la FAMP estarán «muy activos» en este sentido y atentos a la implantación de los principios de la Declaración de Sevilla y la economía circular.
Juan Espadas puso en valor la necesidad de un cambio social y la «imprescindible» cooperación para alcanzar el cambio de modelo, habida cuenta de que «no se puede alcanzar un paradigma determinado sin que la sociedad quiera y lo demande». El también presidente de la Red Española de Ciudades por el Clima aludió asimismo a la generación de empleo y riqueza de este patrón, «una oportunidad que no podemos desperdiciar».
Por último, Martín puso el foco en el hecho de que las ciudades adquieren un rol «determinante» en el procedimiento en tanto que emisores muy principales, siendo «muy importantes», por otro lado, en la transformación social. Es, a su juicio, conveniente el compromiso de la sociedad, pues «de seguir así, en 2050 se habrán consumido los recursos equivalentes a tres planetas».
