El presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido Gutiérrez, ha apadrinado hoy a los alumnos y alumnas graduados del Doble Grado en Finanzas y Contabilidad y Derecho y Doble Grado en Administración y Dirección de Empresas. Inglés y derecho de la Universidad Pablo de Olavide.
La ceremonia de graduación ha contado, entre otras autoridades, con Rocío Reinoso, presidenta del Consejo Social de la UPO; Reyes Pérez Alberdi, Vicedecana de Ordenación Docente de Derecho; Juan Jesús Cambra Fierro, Decano de la Facultad de Ciencias Empresariales; María Serrano Fernández, Decana de la Facultad de Derecho, y Guadalupe Valera Blanes, Vicedecana de Ordenación Académica de la Facultad de Derecho.
Antonio Pulido ha comenzado su discurso como Padrino agradeciendo tanto a los profesores como al personal de Administración y Servicios de la UPO su «trabajo y esfuerzo», que han permitido que la universidad se haya consolidado «como un referente, no solo en Andalucía, sino a nivel nacional y europeo, en cuanto a su calidad universitaria, siendo la única universidad española con todos sus centros de estudio de grado acreditados por el Consejo de Universidades».
El presidente de la Fundación Cajasol ha expresado a los alumnos y alumnas su confianza en que han recibido una «muy buena formación en esta universidad pública» y ha señalado la necesidad de mantenerse en un proceso de formación constante, especialmente «en este tiempo que nos ha tocado vivir, pues el ritmo de los cambios y transformaciones es vertiginoso».
Pulido ha subrayado que «salvo excepciones muy contadas, uno recoge el fruto de lo que siembra» y ha aconsejado que «si se pone tenacidad, esfuerzo, honestidad en el trabajo y empatía con quienes nos rodean, sean compañeros, clientes o las empresas a las que se sirva, indefectiblemente irá bien en la vida».
Otra importante recomendación que el Padrino de los graduados en la ceremonia de hoy ha destacado ha sido la de «pensarnos a nosotros mismos como profesionales dentro de x años es importante, porque, más allá del esfuerzo diario, nos va a permitir algo fundamental: marcarse objetivos, que me parece imprescindible para un profesional y también para una empresa o institución».
«Fuera de los muros de la universidad esperan a estos alumnos expectativas y problemas; desafíos y tentaciones; ilusiones y seguramente momentos de desánimo, pero también, en este mundo cada vez más abierto, muchísimas oportunidades«, ha añadido.
