La Fundación Cajasol y la Cámara de Comercio de Sevilla han celebrado la quinta edición del Premio Iberoamericano Torre del Oro otorgando dicho reconocimiento al expresidente del Gobierno de España, Felipe González Márquez.
Se trata de un reconocimiento de carácter anual con el que se reconoce a una personalidad o entidad del máximo nivel cuya trayectoria está estrechamente relacionada con el fomento de las relaciones políticas, comerciales, económicas y culturales entre los países iberoamericanos.
Felipe González ha recogido el galardón «con gran emoción», recordando que lleva más de 50 años viajando a América Latina y afirmando que este Premio le vincula con Iberoamérica «aún más si cabe».
Ha agradecido el Premio «por muchas razones, pero más aún porque se llama Torre del Oro y estoy encantado de haberlo recibido en Sevilla».
El ex presidente, recién llegado de un viaje a Chile, ha hablado de lazos identitarios y ha animado a «cuidar los vínculos» con América Latina.
El encuentro ha contado también con la participación del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, que ha afirmado que «por fortuna, tenemos la oportunidad de poder aprender de la experiencia y de la comprensión política de Felipe González, quien culminó la Transición y fue el gran artífice de la transformación de nuestro país».
«Fue él quien puso el país en hora, quien nos ubicó en Europa y quien tendió puentes nuevos hacia esa Iberoamérica efusiva, asombrosa y en constante ebullición, como si fuese un continente nuevo inventado por García Márquez», concluyó.
Por su parte, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha afirmado que «para miles de sevillanos, Felipe González representa un símbolo inequívoco de la transición y los inicios de la democracia que hoy disfrutamos gracias a la generosidad de personas como él y a la altura de miras de generaciones de españoles que trabajaron sin descanso por nuestro país».
En el caso concreto de Sevilla, Felipe González «ha sido uno de sus mejores alcaldes sin necesidad de ocupar el despacho de la Plaza Nueva, pues desde el Palacio de la Moncloa apostó decididamente por nuestra ciudad y por su desarrollo«.
El alcalde también ha comentado «su innegable impulso a la capital de Andalucía quedó reflejado con la Exposición Universal de 1992, cuando se acogió al mundo entero y se modernizó en infraestructuras, articulándose como la gran ciudad del siglo XX».
Sanz ha insistido en que «nadie, absolutamente nadie, puede poner en duda que Sevilla progresó decididamente durante los años en que Felipe González fue Presidente de España, dedicando su esfuerzo a construir una sociedad más moderna y avanzada en la que todos tuvieran cabida sin excluir a nadie«.
«Hoy son los que quieren excluirnos a los demás españoles de las decisiones que tienen que ver con España quienes reniegan de él», a la vez que ha dicho que «hoy parece que algunos sevillanos con quienes comparte carné político quieren olvidar ese legado. Pero somos muchos, muchos más, los sevillanos para quienes Felipe fue y sigue siendo un referente como político y un referente como sevillano«.
«Como alcalde de Sevilla estoy profundamente orgulloso de contar entre la nómina de nuestros vecinos con Felipe González, merecidísimo Premio Iberoamericano Torre del Oro«, ha concluido.
Las palabras del presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, han comenzado dirigiéndose al galardonado, Felipe González, para agradecerle su presencia y felicitarle por este reconocimiento que ya alcanza su quinta edición, y ha destacado que “lo que da prestigio a un premio no son los galardones, sino los galardonados”. Sobre el galardonado, Pulido ha puntualizado “el carácter transformador de su obra de Gobierno creo que hoy, casi 30 años después de que dejara la Presidencia de España, es un lugar común para la inmensa mayoría de los españoles y españolas”.
Además, el presidente de la Fundación Cajasol ha explicado que “desde la Entidad que presido llevamos mucho tiempo promoviendo la conexión americana de Sevilla y de Andalucía desde diferentes proyectos y ámbitos, además de colaborar con la Cámara de Comercio en el proceso de internacionalización de las empresas sevillanas. Trabajar en la medida de nuestras posibilidades por el entendimiento y el diálogo entre territorios e instituciones que comparten una misma matriz cultural es una misión prioritaria que nos ocupa desde nuestros orígenes, y en el actual contexto de constantes incertidumbres políticas y económicas se vuelve una tarea más imprescindible que nunca”, puntualizó Pulido.
También ha asistido el presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, quien ha comentado que “la existencia de fuertes lazos históricos y culturales y de una lengua común, además de las excelentes comunicaciones y el conocimiento del mercado por parte de nuestras empresas, convierten a España en la mejor plataforma para reforzar las relaciones económicas y comerciales con Iberoamérica. Y personas como Felipe González constituyen un modelo y una inspiración para profundizar en todo aquello que nos une a Latinoamérica”.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla y presidente de la Asociación Iberoamericana de Cámaras de Comercio (AICO) Francisco Herrero, aseguró que “en la figura de Felipe González confluyen las condiciones para recibir el Premio Iberoamericano Torre del Oro en su V edición.
Consideramos que a lo largo de su trayectoria como presidente del Gobierno de nuestro país han sido destacadas las ocasiones en las que ha dado muestras de su interés y de su preocupación por incrementar y mejorar las relaciones entre España e Iberoamérica”.
Además, en su intervención Herrero destacó que “convertir a Sevilla en la sede de la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno de 2029 y lograr que se ubique en nuestra ciudad la Subsede de la Casa de América, serán los próximos fines a conseguir entre todos, porque así lograremos seguir manteniendo y fortaleciendo los pilares de Sevilla con Iberoamérica”.
El encargado de pronunciar el laudatio ha sido Enrique V. Iglesias, presidente del Jurado del Premio y galardonado en una de sus ediciones anteriores. Iglesias ha añadido que este premio es «de gran justicia e importante para mirar al futuro. Felipe González es un tipo admirado en Iberoamérica, a la que siente como algo compartido».
En esta edición de 2023, el Comité de Honor ha decidido por unanimidad otorgarlo a Felipe González, presidente de España durante el periodo 1982 a 1996, por la “extraordinaria labor desarrollada en la potenciación de las relaciones de España y Europa con Iberoamérica.
En anteriores ediciones se ha otorgado a Enrique V. Iglesias, por su entrega a lo largo de su trayectoria vital al desarrollo y potenciación de la Comunidad; al Buque Escuela ‘Juan Sebastián de Elcano’, por la labor desarrollada como símbolo y Embajador de España en el fomento de las relaciones con Iberoamérica; al ex presidente de Colombia Andrés Pastrana Arango, por el fomento de las relaciones bilaterales con España; y, en la última ocasión, a la Real Academia Española, por mantener la esencial unidad de la lengua española en el ámbito hispanoamericano.