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Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol, ha asistido este jueves 5 de octubre por la mañana a la presentación ante los medios de comunicación de la exposición ‘Juan Gris, Blanchard y los cubismos (1916-1927)’, que se ha inaugurado por la tarde, y que estará abierta al público en el Museo Carmen Thyssen de Málaga, del 06 de octubre de 2017 al 25 de febrero de 2018. Junto a Antonio Pulido han estado Francisco de la Torre, Alcalde de Málaga y Vicepresidente del Patronato de la Fundación Palacio Villalón, Eugenio Carmona, Catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Málaga y comisario de la exposición, Lourdes Moreno, Directora Artística del Museo, y Elisa Durán, Directora General Adjunta de la Fundación Bancaria ‘la Caixa’.
«Estamos felices de poder contribuir a que los malagueños y quienes visitan la ciudad puedan disfrutar de esta muestra. Y felices sin duda porque la Fundación Cajasol se haya incorporado a las entidades colaboradoras de este Museo Thyssen de Málaga», apuntó Antonio Pulido. «La protección del arte y el patrimonio histórico, su difusión y su fomento están en el corazón de nuestra obra social. Una obra social que desarrollamos a lo largo del año con multitud de iniciativas, más de 3.000: algunas de producción propia y otras muchas en las que vamos de la mano de otras fundaciones, entidades y colectivos», resumió el presidente de la Fundación Cajasol, para quien «esta exposición tiene un significado especial». En primer lugar, naturalmente, por la muestra en sí misma, que nos da la oportunidad de acercar al gran público la obra de un artista de la envergadura y trascendencia de Juan Gris, figura clave del cubismo, y explorar sus vínculos personales y creativos con otras figuras del momento. «Todo un lujo que estoy seguro de que disfrutarán», matizó; En segundo lugar, porque esta muestra supone el inicio de una colaboración con el Museo Thyssen que confío en que tenga una larga y fructífera continuidad en el futuro. «Se trata de una de las instituciones artísticas de más renombre en nuestro país y estamos encantados de poder trabajar con ellos y respaldar sus actividades», refrendó Antonio Pulido, que insistió en el hecho de que «para la Fundación Cajasol es muy especial poder sumarnos y poner nuestro granito de arena en esta formidable explosión cultural que está viviendo la ciudad de Málaga en los últimos tiempos», y resaltó la vocación de que «nuestro compromiso social alcance con toda su intensidad a todo el territorio de Andalucía».
La apuesta de la Fundación Cajasol por fomentar la cultura, estimular la creación y acercar el arte al gran público es un compromiso de siempre en la obra social de la Fundación Cajasol, que estamos además redoblando en los últimos tiempos. En estos años hemos abierto una gran sala de exposiciones en el corazón de Sevilla, la Sala Murillo, y también contamos con un nuevo espacio expositivo en Huelva. Desarrollamos también acuerdos con instituciones como el Museo del Prado o el Museo de Bellas Artes de Sevilla, a los que ahora se suma el Museo Thyssen de Málaga.
Estamos también llevando a cabo un trabajo intenso de puesta en valor del patrimonio artístico que atesora la Fundación Cajasol, la mayor colección privada de arte de Andalucía y una de las más importantes de España. En este tiempo hemos organizado distintas exposiciones y también hemos desarrollado la edición de catálogos muy completos, para dar la oportunidad a todos los ciudadanos de conocer mejor las obras de nuestra colección, que abarcan desde el siglo XVI hasta nuestros días. «Son todas ellas muestras del compromiso de la Fundación Cajasol con el arte y por contribuir a construir una sociedad más abierta al mundo, más culta y mejor informada, más moderna, con más bienestar y oportunidades, y, en definitiva, más justa», sentenció Antonio Pulido.
LA EXPOSICIÓN
Con esta exposición, en la que participan artistas como Juan Gris, María Blanchard, Manuel Ángeles Ortiz, Francisco Cossío, Salvador Dalí, Albert Gleizes, Julio González, Vicente Huidobro, André Lhote, Jacques Lipchitz, Jean Metzinger, José Moreno Villa, Benjamín Palencia, Joaquín Peinado, Pablo Picasso, se invita a los visitantes a descubrir uno de los momentos más apasionantes del arte del siglo XX: la redefinición del cubismo más allá del período (1907-1914) en el que Pablo Picasso y George Braque, creadores del movimiento, desarrollaron su revolucionaria propuesta artística, que cambió para siempre la forma de ver el mundo a través de una obra de arte.
Así, con el inicio de la Primera Guerra Mundial y hasta finales de los años veinte, otros artistas tomaron el relevo de los creadores del movimiento, haciendo que el cubismo tuviera una segunda vida, intensa y plena de creatividad. Los protagonistas serán Juan Gris, figura capital para comprender la transformación del cubismo en esos años, María Blanchard, cuyo papel principal en ese movimiento quiere destacar esta muestra, y varios artistas con los que ambos tuvieron amistad y sintonía creativa, como el escultor Jacques Lipchitz, los pintores Albert Gleizes y Jean Metzinger y el poeta Vicente Huidobro.
Este es el panorama que, con un discurso inédito, analiza esta exposición, en la que se han reunido más 60 obras, entre pinturas, esculturas, dibujos y material documental. El discurso, estructurado en tres secciones comienza con un diálogo entre Gris y Blanchard, a través de numerosos ejemplos sobresalientes de su pintura sintética, geométrica y plana. La contextualización de su obra junto a la de otros grandes maestros del siglo XX con los que compartieron horizontes creativos conforma el segundo capítulo de la muestra, que se cierra con una representación de artistas de la primera generación de la vanguardia española —Dalí, Moreno Villa, Palencia, Peinado, Ángeles Ortiz, Cossío—, que tuvieron su acercamiento inicial a la modernidad a través del cubismo, y sobre todo del de Juan Gris.
