Letras en Sevilla IX
Joana Bonet habló de cómo, a través de su trabajo en distintas revistas especializadas, ha formado parte del cambio en el tratamiento del sector de la moda, que, en sus palabras, » además de ser una industria que da trabajo a mucha gente, también es un altavoz cambiante y transformador».
La periodista expresó su orgullo por haberse «dedicado durante mucho tiempo a las cosas pequeñas, que se han ido haciendo muy grandes. Cuando hablábamos del cáncer de mama, al principio daba miedo hablar, causaba estigma, y con esta enfermedad, que he pasado en primera persona, hemos hablado con libertad y conocimiento, pero ocupándonos de los microcosmos».
Bonet señala también que «cuando las mujeres llegan a un puesto de poder, tienen que entrar por moldes construidos por hombres» y se pregunta «¿Tenemos que adaptarnos a ese marco creado anteriormente de manera muy masculina? Cuando yo no me quise adaptar a ello en algunos de los grupos de comunicación más importantes y progresistas de este país, me tuve que salir, porque no entendía la cultura de cerrar los tratos a las 20 horas porque yo tenía que cuidar.»
La también periodista Sheila Hernández emocionó al público narrando su difícil historia. Criada por sus abuelos, sufrió bullying en el colegio, incluso por parte de una profesora que llegó a cuestionarle su deseo de convertirse en periodista y, al terminar los estudios, pagados con el esfuerzo de su abuelo, albañil, se encontró con que no tenía cabida en los medios de comunicación y decidió crear el suyo propio.
«Si veis mi medio, os vais a encontrar algo totalmente diferente porque mucha gente odia lo que hago, y lo que hago es demostrar a la sociedad que, aunque pasen muchas cosas malas y todo gire en torno a las catástrofes, también existen cosas positivas. Con mi medio abrazo la vida», expresa Hernández.
En este sentido, narró cómo, gracias a su iniciativa de enviar mensajes de felicitación a un niño al que habían acosado en el colegio, este ha recuperado sus ganas de vivir.
Posteriormente, Almudena Cid, exgimnasta olímpica y actriz, contó su experiencia profesional y vital, llena de obstáculos que ha sabido afrontar, en la charla «Llegando a la meta».
«Todo lo que decían era que tenía que dejar paso a las nuevas generaciones. El edadismo del que se habla en las empresas, yo lo viví con 20 años. Estaba gorda y era mayor. Me volví una gimnasta creativa, intentaba hacer cosas que no habían hecho las gimnastas hasta el momento», explicó Cid, que consiguió que las gimnastas más mayores fueran aceptadas.
«Vieron el arte en el tapiz, vieron que la gimnasta madura ofrecía un tipo de gimnasia diferente a las gimnastas más jóvenes porque nuestra capacidad de expresar y de entender las emociones no tenía nada que ver cuando teníamos 16 a cuando teníamos 24. Nuestra gimnasia era muchísimo más artística».
«Reconstruirse depende en gran medida de uno mismo, es cuestión de tiempo y esfuerzo» es una de las grandes lecciones de vida que dejó Almudena Cid al público de Letras en Sevilla, que disfrutó mucho de su charla.
Cerraron las jornadas Cayetana Álvarez de Toledo, diputada en el Congreso, Zaida Cantera, diputada en el Congreso y comandante en retiro del Ejército de Tierra, y Carmen López Manzano, luchadora MMA y química, que, bajo el título «Tres ángulos de un desafío», abordaron numerosas cuestiones, como las cuotas, los problemas que afrontan las mujeres y la situación política actual.