El Gran Teatro de Huelva acogió ayer la Gala de la IV edición de los Premios Buena Gente de Huelva, convocados por Huelva Buenas Noticias y la Fundación Cajasol con el objetivo de ensalzar los valores humanos y que este año han recibido los votos de más de 45.000 personas, lectores del periódico que se han sumado con entusiasmo a estos merecidos reconocimientos.
Al acto han asistido, entre otras autoridades, Bella Verano, delegada del Gobierno andaluz; Manuela Parralo, subdelegada del Gobierno de España en Huelva; María Eugenia Limón, presidenta de la Diputación de Huelva; Francisco José Mora, director general de la Infancia de la Junta de Andalucía; Gabriel Cruz, alcalde de Huelva; María Antonia Peña, rectora de la Universidad de Huelva; Antonio Pulido Gutiérrez, presidente de la Fundación Cajasol; Pilar Miranda, presidenta de la Autoridad Portuaria de Huelva, y Ramón Fernández Beviá, dirctor de Huelva Buenas Noticias.
La Gala, conducida por Mari Paz Díaz, se inició con una interpretación de ‘Meditación’, de la ópera ‘Thais’, al piano y violín, tocados por Manuel Boniquito y Laura Fernández Trufero, y con la entrega de distinciones a los nueve nominados: Ana Gil; Merlina Moreno; Celes Vizcaíno; José Julián Cepeda; Leni Vázquez Almazán; Cinta Martos; Jesús Flichi; Manuela Romero y Juan Pérez -Cuartelillos-.
Tras un nuevo paréntesis musical a cargo de Boniquito y Fernando Trufero, se procedió a la entrega de los premios. En primer lugar, a Nicolás Capelo, a quien se homenajeaba póstumamente, y posteriormente al resto de premiados: Teodoro Bernal; El Pecas; Luisa García Romero; Luís Anes; Franky Ruiz y Javier Galardi.
Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol, subrayó que «estos premios se convierten en una nueva oportunidad de pararnos a reconocer y celebrar todo lo bueno que tenemos y que somos como pueblo y como colectivo». «Se trata, sin duda, de una forma de terapia para enfocarnos y seguir el ejemplo de los galardonados aquí hoy, un motivo más por el que seguir trabajando y superando retos, dando lo mejor de nosotros mismos», añadió.
Por su parte, el alcalde de Huelva destacó que «cuando la gente viene de fuera pueden atribuir calificativos positivos sobre belleza, clima, limpieza u otras variables, pero lo que siempre aseguraban estos foráneos es que lo mejor que tenía Huelva era su gente, su Buena Gente«.