Si he puesto en marcha las otras etapas de mi plan conseguiré sobrevivir a la inflación, que no es poco; pero para superar la inflación debo esforzarme más.
- Reducir los Gastos.
- Aumentar el Ahorro.
- Moderar las Deudas.
- Invertir en Activos que renten más que la inflación.
Moderar las Deudas
Como vimos el lunes pasado debo intentar pagar más capital de mis deudas para disminuir los intereses que me restan la capacidad de ahorro; pero lo más importante: debo evitar endeudarme más.
Para ello, insistimos en el uso moderado de las tarjetas de crédito y en posponer cualquier solicitud de préstamo para otra época mejor, si es posible, claro.
Una regla de oro: antes de comprar algo pienso si se trata de una necesidad o de un deseo. Ya sabe, la necesidad si no se atiende me va a producir un perjuicio; pero el deseo si no se atiende no pasa nada.
Invertir en Activos que renten más que la Inflación
Invertir el Ahorro.
Los asesores patrimoniales aconsejan que, al menos, tenga invertida hasta el 15% de la cantidad ahorrada; sin embargo, en un escenario de inflación ese porcentaje debería subir.
Invirtiendo, el dinero ganará valor en lugar de perderlo. Por ejemplo:
- Compra de bienes raíces y obtener una renta a través del alquiler o esperar a que suban los precios en el mercado inmobiliario para vender.
- Invertir en Renta Variable y obtener rendimientos a través del cobro de dividendos o de la cotización en Bolsa; aunque esto no está exento de riesgo.
Una buena inversión debería darme una rentabilidad anual que bata la inflación; pero con una inflación entorno al 8%, como la que tiene España, no puedo esperar batir dicha cifra sin asumir un riesgo alto en las inversiones.
Si consigo una inversión que rente un 2% o 3% con un riesgo que crea asumible, pudiera compensar algo la pérdida que me inflige la inflación en el capital invertido.
No existen las inversiones sin riesgo. Cuando un producto; aunque sea de renta fija o similar, da mucha rentabilidad es que entraña mucho riesgo.
Tener mucho riesgo no solo significa no obtener rentabilidad; sino que existe la posibilidad de perder parte o todo el capital invertido.
Algunos consejos básicos para empezar a invertir en valores:
- Hago coincidir el perfil de riesgo de mi cartera con el mío propio.
- No me dejaré llevar por los movimientos a corto plazo.
- Construiré mi cartera poco a poco (por ejemplo: cada trimestre 200 € hasta alcanzar 1.000 € y ya veré cómo evoluciona mi cartera).
- Contar con un horizonte temporal de 5 o 10 años.
- Tener mi cartera diversificada. “No poner todos los huevos en la misma cesta”.
Si me lo puedo permitir, contrataré a un asesor o bróker.
Este evaluará el tipo de inversor que soy: mi perfil. Mi preferencia por el riesgo y pondrá en la balanza tanto la volatilidad como el capital a invertir y el plazo para determinar qué producto es ideal para mí, inexperto inversor.
Esperamos que con estos mensajes hayas pasado a la acción y, al menos, consigas sobrevivir a esta inflación.
