La compañía de teatro de Blanca Marsillach ha iniciado esta semana en el Teatro Villamarta de Jerez de la Frontera (Cádiz) una gira que pasará por cinco ciudades andaluzas con la que quiere mostrar a los jóvenes que los clásicos españoles son «los raperos del siglo XXI» y que sus versos son «pura música». Dos piezas forman parte de este iniciativa, que cuenta con la colaboración de la Fundación Cajasol: ‘Enamórate de Lope’ y ‘Una noche blanca con los clásicos’, un homenaje a su padre, Adolfo Marsillach, que realiza rescatando la obra que bajo ese título llevó a escena junto a Amparo Rivelles y María Jesús Valdés. Este proyecto trata de que los estudiantes «se lo pasen genial» con los clásicos.
Tras su paso este martes y miércoles por Jerez, la iniciativa viajará hasta final de año por Sevilla, Córdoba, Huelva y Granada para encontrarse en cada lugar con estudiantes de secundaria y bachillerato y acercarles los versos del Siglo de Oro de una forma diferente y divertida. «Queremos que no vean a los clásicos como unos ancianos aburridos sino como a los raperos del siglo XXI», explica Blanca Marsillach.
El espectáculo se divide en dos partes:
- En una primera dos intérpretes recitan frente a la imagen proyectada de Adolfo Marsillach piezas que formaban parte de ‘Una noche blanca con los clásicos’; después son los propios estudiantes los que suben al escenario y recitan poemas como ‘Que se nos va la Pascua, mozas’; ‘Poderoso caballero es Don Dinero’ o ‘Gerineldo para pasar’ hasta convertirlos en temas de rap. «Al ser ambos endecasílabos, rap y poesía tienen la misma métrica», dice la actriz. En esta reinterpretación de la poesía del Siglo de Oro, se han eliminado algunos de los poemas más místicos que se incluían en la versión original de ‘Una noche blanca con los clásicos’, como algunos textos de Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz, para dar más espacio a aquellos que por su temática pueden conectar mejor con los jóvenes espectadores.
- ‘Enamórate de Lope’, la segunda parte, cuenta una historia de amor a través de los poemas de Lope de Vega en tono de tragicomedia romántica. Durante la primera parte los espectadores son testigos de cómo Belardo intenta enamorar a Filis con todas las armas que tiene a su alcance, desde recursos literarios hasta diferentes estilos musicales, y después suben al escenario para sumarse a la escena. «A través del juego ese puente que distancia los siglos deja de existir, los jóvenes ven que los sentimientos que había entonces y ahora siguen siendo los mismos: el odio, el amor, la vida, la muerte…».