El Teléfono de Atención Social por el COVID-19 cierra tras recibir 3.400 llamadas durante la pandemia sanitaria. La consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, y el presidente de la Plataforma Andaluza del Voluntariado, Armando Rotea, han agradecido la labor de las 50 personas voluntarias que han estado atendiendo este teléfono, destacando la implicación de la juventud andaluza en la emergencia social. «Es una satisfacción estar aquí hoy clausurando esta iniciativa, cerrando una etapa y poniendo la mirada en un nuevo futuro esperanzador y para el que estoy convencido vamos seguir trabajando de la mano», explicó Antonio Pulido, reiterando su convicción de que para superar las consecuencias económicas y sociales que toda esta crisis sanitaria ha traído consigo «es fundamental trabajar juntos, instituciones públicas y privadas, pues es el momento de los compromisos, los consensos y de unir fuerzas. Juntos somos capaces de mucho más», destaca.
La consejera andaluza de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, por su parte, ha subrayado que «el voluntariado andaluz ha vuelto a estar, como siempre, a la altura de las circunstancias», trabajando en 500 turnos, con 1.000 horas de atención individualizada. El 43% de las llamadas han provenido de la provincia de Sevilla, seguida de Málaga con el 25%; Cádiz con el 9%; Córdoba y Granada -ambas con el 5%-; Jaén, con el 4%; Huelva y Almería, las dos con el 3% cada una. Además, un 3% ha sido relativo a otras provincias. En cuanto a los intervalos de edad, la consejera ha explicado que un 63% de la ciudadanía que ha hecho uso de este servicio se encuentra entre los 30 y 50 años, seguido de la franja de edad de los 50 a los 65 años con un 21% y del 12% en cuanto a menores de 30 años.
