El matador de toros Finito de Córdoba y el cantante Manuel Lombo protagonizaron la 52º edición de los Mano a Mano de la Fundación Cajasol, encuentros culturales que se celebran en Sevilla desde 2007 y que buscan conexiones entre la Tauromaquia y otras disciplinas. Esta cita ha abordado la relación entre el toreo y la música como tema central, aunque en ella se ahondó también en las trayectorias de cada uno de los invitados, Finito y Lombo, comprobándose que se pueden establecer estrechos lazos entre ambos artes. Como es habitual, el encuentro fue conducido por el director de ‘Toromedia’, José Enrique Moreno. Finito no era nuevo en los ‘Mano a Mano’, que volvieron a poner a prueba su poder de convocatoria agotando el aforo del salón de actos de la Fundación Cajasol. José Enrique Moreno, moderador de estos eventos, citó a Bergamín antes de poner el toro en suerte al diestro cordobés, que se deshizo en elogios con Manuel Lombo evocando el inicio de su amistad.

Pero había que entrar en faena. “Los toreros no seríamos nada sin la música; el flamenco y el toreo son dos almas que van de la mano”, señaló Juan Serrano invocando «ese mundo tan mágico que se ha inspirado en el toreo para crear letras tan especiales». A partir de ahí, Finito defendió el toreo y la música como expresiones de la misma cultura.

«Antes la ética que la estética», espetó Lombo para definir personal y taurinamente a su amigo Finito de Córdoba. El cantante habló de toros y música como dos caras «de la cultura del pueblo». «Cuando una faena es memorable está acompañada de la música», prosiguió Manuel Lombo antes de hablar de conceptos como «emoción» y «fuente de inspiración absoluta» para definir su relación con el mundo del toreo.

El torero y el cantaor desvelaron los inicios de su amistad, cuajada en un encuentro inesperado y casual en Jerez.

Finito hizo un largo alegato en torno a la situación sociopolítica de la fiesta de los toros demandando una verdadera unión y reestructuración del sector y de los propios profesionales sin ahorrar críticas al estado de la profesión y las abismales diferencias de cotización entre matadores en las primeras ferias del circuito. Aún quedaba una sorpresa final: Manuel Lombo se arrancó cantando y Finito replicó pegando lances. A esas alturas se habían olvidado del reloj. Llegaron, llenaron y gustaron.

Sala llena para presenciar el Mano a Mano entre Finito de Córdoba y Manuel Lombo en Sevilla

Finito de Córdoba y Manuel Lombo charlando sobre El toro y la música en la Fundación Cajasol

Manuel Lombo en los Mano a Mano de la Fundación Cajasol en SevillaFinito de Córdoba en los Mano a Mano de la Fundación Cajasol en Sevilla