La Fundación Cajasol ha celebrado en Sevilla la mesa redonda Preloved Fashion: la segunda vida de las prendas, sobre la sostenibilidad y reutilización de las prendas. La actividad, organizada de la mano del Grupo Joly, ha contado con profesionales vinculados al sector de la moda como son Rocío Pérez, fundadora de Mimeraki Vintage; Javier Villanueva, fundador de Península y Flamingos Vintage Kilo Málaga; Ana Alpuente , periodista y diseñadora gráfica especializada en moda vintage; Laura Opazo, escritora y divulgadora sobre moda sostenible, Lydia García , directora de la Colección López-Trabado de Alta Costura española y Magdalena Trillo, asesora de transformación digital de Grupo Joly, como moderadora.

El objetivo de esta jornada ha sido analizar la situación actual del sector y reflexionar sobre la importancia de avanzar hacia un modelo sostenible en contraposición al actual ‘fast fashion’.

La inmediatez se ha convertido en una de las cualidades de la moda actual. El ritmo de la industria de la moda es irrefrenable y se trabaja a gran escala y con tendencias cambiantes que incitan a un consumo masivo e inmediato, es lo que se conoce como ‘la moda de usar y tirar’.

Como respuesta a estas macro producciones, surge el interés en ciertos sectores por buscar lo auténtico y genuino en prendas y accesorios de segunda mano. Muchos encuentran en ellas no sólo un diseño, sino también valores añadidos como su historia, buena confección, calidad y sostenibilidad.

En este sentido, Javier Villanueva refiriéndose a la moda vintage, ha destacado que “ahora ha entrado muchísima gente joven gracias a tiendas como las nuestras, que no son excesivamente caras y que esto implica que no haya que gastarse tanto dinero en comprar ropa. Simplemente, apostar por la calidad de los tejidos.”

Por su parte, Lydia García, como experta en alta costura, ha reflexionado sobre el concepto de lujo y su intento por democratizarlo: “esto del lujo asequible es imposible. El lujo, por definición, no es asequible. Eso no quiere decir que o tengamos derecho o que no ahorremos. Pero en sí mismo, el lujo no puede ser asequible porque si no, no es lujo.  Ahora el lujo está pensado para las masas. Los bolsos antes eran de muchísima más calidad, los materiales., los acabados, la mano de obra, etc.”

Estas y otras cuestiones fueron debatidas en esta jornada donde el público asistente ha podido conocer el contexto actual del sector textil y meditar sobre el uso responsable de la ropa y su consumo.