El Teatro Cajasol Sevilla ha sido el escenario de la IV Conferencia Internacional en Sevilla de Mujeres Avenir, un foro que ha reunido a destacadas embajadoras y expertas para analizar los retos y oportunidades de la presencia de la mujer en la toma de decisiones a nivel global.
Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol, ha dado la bienvenida al evento, celebrado en el marco del Día Internacional de la Mujer, reafirmando el compromiso de la institución con la igualdad de género: «Con mucho gusto acogemos de nuevo esta cumbre sobre la igualdad que ya cumple su cuarta edición gracias al empuje de Mujeres Avenir y que este año ha puesto el acento en las oportunidades de liderazgo de las mujeres en todos los ámbitos de nuestra sociedad».
Pulido ha señalado la necesidad urgente de seguir abriendo espacios para que las mujeres puedan acceder a puestos de dirección en la empresa, la política y la vida pública: «O mejor dicho, en la necesidad de que se abran muchas más oportunidades de que las mujeres puedan acceder a las esferas de toma de decisión».
Tras su intervención, María Luisa de Contes d’Esgranges, presidenta fundadora de Mujeres Avenir, ha agradecido la implicación de la Fundación Cajasol en la promoción del liderazgo femenino y ha destacado el papel de las ponentes en esta jornada: «Debo también expresar mi agradecimiento a las embajadoras panelistas por el esfuerzo importante de ordenación de sus complicadas agendas para acudir hoy a Sevilla y exponernos sus diversas y ricas experiencias y sus respectivos vividos en los países que cada una representa».
Asimismo, ha subrayado la relevancia de esta conferencia en un contexto global marcado por desafíos políticos, sociales y económicos: «Precisamente por esta circunstancia es por lo que la voz de las mujeres, lo decía también Antonio Pulido, se hace aún más necesaria y conferencias como la nuestra adquieren mayor trascendencia».
La diplomática Helena Cosano, encargada de moderar la mesa redonda, ha puesto el foco en los avances logrados en España en materia de igualdad, destacando que «el avance ha sido vertiginoso en los últimos años. Es una sociedad prácticamente difícil de reconocer». Ha recordado el marco legislativo que ha permitido este progreso y cómo España ha pasado de ser vista como un país conservador a convertirse en un referente en materia de igualdad y lucha contra la violencia de género.
Sin embargo, ha señalado que aún queda camino por recorrer, especialmente en sectores como la diplomacia, donde la presencia femenina ha crecido de forma más lenta que en otros ámbitos: «Actualmente las mujeres representan el 32% de la carrera diplomática española, todavía lejos de la paridad, pero con una voluntad política clara de avanzar en ese sentido».
El debate ha contado con la participación de destacadas embajadoras, que han aportado su visión y experiencia sobre el papel de la mujer en el ámbito diplomático e institucional. En concreto, han intervenido Nairimas Ole Sein, embajadora de la República de Kenia; Vesna Andrée Zaimovic, embajadora de Bosnia y Herzegovina; Adriana Bolaños, embajadora de la República de Costa Rica; Wilma Andrade, embajadora de la República del Ecuador; Zeineb Ely Salem, embajadora de la República Islámica de Mauritania; y Catherine Fautrier Rousseau, embajadora del Principado de Mónaco.
Las participantes han reflexionado sobre la necesidad de acelerar los avances en paridad de género, una meta que, según el último informe del Foro Económico Mundial, aún tardará más de 130 años en alcanzarse si no se redoblan los esfuerzos.
Durante el encuentro se ha entregado el Premio Mujeres Avenir 2025 a Dyanne Marenco González, presidenta del Comité Regional Interamericano (CORI) de la Cruz Roja.
La jornada ha finalizado con la intervención de Marjorie Vanbaelinghem, cónsul general de Francia, encargada de la clausura del evento, que ha subrayado la relevancia de la presencia femenina en la construcción de una sociedad más igualitaria y equitativa.
