La Fundación Cajasol celebra el Día de las Escritoras mediante la organización de una mesa redonda en torno a las posibles diferencias entre las mujeres y los hombres a la hora de escribir, publicar y vender sus obras. Para ello, se han sentado a tratar estas cuestiones Beatriz Rodríguez Delgado, escritora y editora, María José Barrios, fundadora de la librería Casa Tomada y Eva Moreno Lago, profesora en el departamento de Literatura Española e Hispanoamericana de la Universidad de Sevilla y Amalia Bulnes, periodista cultural y moderadora de la mesa.
Bajo el título “Más allá de una habitación propia”, en clara alusión al célebre ensayo escrito por Virgina Woolf, las protagonistas de este encuentro han analizado el papel de las escritoras desde el pasado hasta el presente en los distintos ámbitos del campo editorial.
Amalia Bulnes, como periodista y moderadora, ha querido manifestar “la necesidad que sentimos las mujeres profesionales de trabajar la excelencia, de tener siempre que estar demostrando el doble. Es inaceptable que una escritora sea mala.”
En este sentido, María José Barrios, ha reivindicado que “tenemos derecho a tener malas escritoras, malas poetas, malas escritoras, malas escritoras lesbianas”. Asimismo, en relación con lo que se denomina como “literatura femenina” ha confesado que “no hay diferencias entre hombres y mujeres a la hora de escribir sino puntos de vista con experiencias distintas”. Esto hace que “muchas veces, se utiliza a las escritoras, y se categoriza como literatura femenina, como algo inferior para las mujeres, estos géneros románticos, como si fuese un lenguaje representativo de la literatura escrita por mujeres”.
Por su parte, Beatriz Rodríguez, ha manifestado que “como escritora, me interesa el otro pate de la realidad. Es decir, contar la realidad desde el punto de vista femenino. Actualmente, estoy leyendo escritoras que parten del realismo mítico. Es decir, reescribir la literatura desde el punto de vista de las mujeres, un plano mágico para poder inventar el mundo como nosotras pensamos que es”.
Con respecto al tratamiento que reciben las escritoras por parte de la crítica literaria, Eva Moreno Lago ha destacado que “la mayoría de las reseñas hechas de las escritoras o se centraban en el cuerpo, tanto para bien como para mal o se centraban en la infantilización, es decir, siempre eran emergentes, escritoras que siempre estaban emergiendo a pesar de haber escrito cuatro libros”.
El Día de las Escritoras se trata de una iniciativa promovida por la Biblioteca Nacional de España, con la que se pretende reivindicar la labor y legado literario de las mujeres, tantas veces relegadas a un segundo plano en la historia. Distintas instituciones, espacios culturales de toda España se han sumado a esta celebración mediante la realización actividades literarias en torno a esta efeméride.
