El confinamiento en casa provocado por el Covid-19 nos ha dado mucho tiempo para dedicar a cosas que siempre teníamos pendientes ¿Por qué no dedicamos algo de este tiempo a mejorar nuestras habilidades financieras? Tanto en época de bonanza como en época de crisis, llevar al día nuestro Presupuesto, personal o familiar, es fundamental para que no nos afecte ninguna eventualidad económica, ya sea personal o global. El equipo de voluntariado de la Fundación Cajasol ha lanzado este mes de junio una nueva serie de consejos sobre esta materia en ‘Los Lunes Financieros’, con los que pretende ayudar a poner en marcha su Presupuesto y localizar las ventajas que tiene para sus finanzas familiares. Tras analizar el concepto de presupuesto, centrarse en la reducción de los gastos, y aconsejar sobre cómo concentrarse en en pagar la deuda que ya tienes, en esta última entrega se detienen en los imprevistos económicos, que son, sin duda, una de las peores pesadillas para cualquier familia, porque son sobrevenidos y no avisan, como el que vivimos por el COVID-19.
- Lo ideal es que tengamos disponible un Fondo de Emergencia: el dinero ahorrado de nuestro Presupuesto para hacer frente a cualquier situación inesperada sin tener que pedir un préstamo o endeudarnos peligrosamente con tarjetas de crédito.
- En los periodos de estabilidad económica, es recomendable contar con un Fondo de Emergencia de entre 3 y 6 meses de gastos presupuestados. Durante una dificultad financiera más severa como esta, debemos ampliar aún más nuestra red de seguridad financiera. Idealmente, debería cubrir 6-12 meses de gastos.
- Tenga el dinero a mano y en sitio seguro. Si es una entidad financiera, en un producto con máxima liquidez, sin riesgo y dónde no tenga domiciliado ningún pago.